viernes, septiembre 17, 2010

Los nombres secretos

Platicando con mi amiga Elsa sobre los nombres que tenemos llegamos a la conclusión de que no tenemos cara de lo que nombran nuestros nombres. Hay algo de ominoso en los nombres propios principalmente porque no tienen nada de propios puesto que los padres deliberadamente los ponen porque así tiene que ser, esto no tiene remedio así será siempre, lo único que podemos hacer es renegar de nuestro nombre o aceptarlo y luego hasta hacerse a la idea de que no está tan mal.

Mi nombre es Idalia. Me llamo así porque así se llama mi mamá: este recurso es de los más originales. Una vez una amiga me preguntó que por qué me comentaba a mí misma en mi blog. Y yo le dije que no era así, que no me comentaba a mí misma que la que comenta es mi mamá (que también tiene el seudónimo de Arcana y por alguna razón no lo usa para comentarme) y lo hace con su nombre que es el mío también. Al fin y al cabo me siento contenta de ser Marie en este espacio del blog y del twitter, pero en la vida cotidiana soy Idalia, así a secas, no me llamo María Idalia porque también me lo han preguntado.

Hoy le platicaba a Elsa que a lo más que puedo recurrir es que mi bisabuela decidió que mi mamá se llamara Idalia porque mi abuela le había puesto Santa, y había elegido este nombre porque le gusta mucho el personaje de Federico Gamboa. Mi bisabuela se opuso a que mi abuela le pusiera a mi madre el nombre de una puta y le puso Idalia porque así se llamaba su mejor amiga. Idalia tiene doble significante: el secreto que es el de Santa, que a su vez Santa cubre el de puta, y el visible que sería el de la mejor amiga. Y ahora que lo pienso mi mamá sí es mejor amiga de muchas personas, es una persona muy amigable de hecho hasta me cae bien ja ja, en verdad me cae bien. Así traigo la herencia de este nombre, aunque mi nombre secreto es Cordelia porque es el nombre que me quería poner mi mamá y mi papá dijo que era horrible el nombre, claro nunca leyó King Lear, sólo se opuso así porque sí y les pareció adecuado ponerme el mismo nombre de mi mamá, para qué romperse la cabeza pues si nada más hay que cargar con el nombre toda la vida. Cordelia significa ideal de mujer, y sí me hubiera gustado llamarme así, a lo mejor me hubieran molestado en la escuela, pero de por sí uno sufre en las escuelas que más da un poquito más.

Quizá una manera de nombrarse a uno mismo es mediante el seudónimo pero no todas las personas recurren a esto ¿todos son felices con el nombre que tienen?

2 comentarios:

Octopus Queque dijo...

Yo sí soy mucho muy feliz con mi nombre. De hecho, no sé si suene raro, pero yo sí me siento muy Elsa. Siento que tiene muchas variables y es un nombre con el cual puedo jugar muchísimo, como Elso, Elsie, Elzapato, Elzapi, pero sigue siendo Elsa, es tan maleable como a veces es mi personalidad (L). Mi mamá también se llama así, pero yo siento que ella se siente más identificada con su nombre completo, Elsa Ponce. Siempre que le llaman es preguntar por el ingeniero Elsa Ponce y toooooooooda la llamada le dice así. Es rarísimo. Además, Elsa es un nombre cortito, me encanta. Y para más cosas raras: me gusta mi nombre completo, siento que es como una olita y que empieza y termina fonéticamente bien. Au contraire, a mi se me hace más difícil escoger un seudónimo. Ah, qué padre post, me inspiraste a escribir unas cosas que a ver si nacen en el blog.

Por cierto, ya nos veremos en clase de tejido y la sig semana empiezo los cursos en la casa universitaria del libro, encomiendo un covadongazo.

Ya me dijeron.

Sí tengo la chamba! :D

Abrazos Idalito, te quiero muchísimo.

Idalia dijo...

Me gustó muchísimo tu comentario, sobre todo porque das respuesta a una tocaya tuya con la que se dio toda esta plática, en donde le dije que te conocía a ti por eso de los nombres.
Te quiero Elsito.
Covadonga seguro y ya nos pondremos al corriente con las noticias en clase de tejido.
Besitos.