domingo, octubre 14, 2012

Escribiré.
Eso dije que haría cuando abrí este blog y antes de abrirlo y después, y luego entonces ¿por qué no lo hago? O si lo hago después de esperar largos días y semanas... pero como a escondidas. ¿A escondidas de quién o de qué? Parece estúpido pero a veces pienso "ese blog no va para ningún lado". Y la verdad me gusta que no vaya, que sea cotidiano y en momentos aburrido. Debería de seleccionar los post más aburridos para darme cuenta que en verdad esta escritura tiene bajas y altas.
Bueno quería escribir, nada más porque sí. Hace unas semanas instalé la aplicación del iPhone para blogger y pensé que teniendo mi blog tan literalmente a la mano escribiría en cualquier momento. Pero no. Observo todos los días el icono con su B naranja... Y pienso en todas las cosas que podría decir y que no digo.
Escribir no es fácil.
Odio que las personas me digan y qué cosa nueva has escrito, así como si escribiera porque sí y es verdad que escribo porque quiero pero muchas veces me doy cuenta que estoy aterrada y que sólo me calmo cuando pienso: escribe honestamente.
No hay novedades.

Me gusta escribir siendo yo. Aunque siempre descubra que mi yo cambia, y cambia tantas veces como el color de mis uñas. Esto es una verdad: me gusta pintarme las uñas. Necesito tenerlas pintadas. No es a veces, es siempre. Colecciono barnices. Mi marca favorita es Kikos. También, ya que estoy hablando de estas cosas, me gusta pintarme los ojos. A veces cuando voy a salir a la calle debo inspeccionar que traigo los ojos delineados, de otra forma siento que las personas me verán enferma. Pintarme los ojos es un acto de vida. Aunque suene frívolo y superficial, es así. Es como si necesitara de esa línea negra para dirigir la mirada a donde sea que la lleve.
Comencé la relectura de un libro que me encanta y que le regalé a mi amigo @ishcorp (como agradecimiento de una convocatoria a la que me invitó para ilustrar un huaje) y justo hoy me encuentro con esta frase:
"Una cosa ya adivinaba: era necesario escribir siempre, no esperar un momento mejor pues éste simplemente no llegaba. Escribir siempre me costó, aunque hubiera partido de lo que se llama vocación. Vocación no es lo mismo que talento. Se puede tener vocación y no tener talento, es decir, se puede ser convocado y no saber cómo ir".
Clarice Lispector en Revelación de un mundo.

Es necesario escribir. No me importa si es sobre el color de mis uñas pero escribiré porque necesito hacerlo, porque desde que decidí ser escritora es lo único que me ha salvado. No tengo ningún pretexto. Escribo porque es la única manera de retener el tiempo, de poder medir cómo he vivido. Y cuando escribo me olvido un poco de las cosas, es mi archivo de la trivialidad y lo cotidiano, pero esa es mi vida. Qué tedio las personas inteligentes que siempre tienen cosas profundas que decir...
Hoy después de semanas de tener una nube morada encima de mí, una nube gorda llena de tormenta acumulada, por fin me siento bien.

Creo que he sobrevivido.

1 comentario:

IshCorp dijo...

Asi que tenias dos copias eh!